Homenaje a: Samuel "El del Retiro"

Samuel Lamillar Román
En realidad su verdadero nombre era José Manuel, ya que así fue asentado en el registro civil, pero por desavenencias conyugales,  fue bautizado como Samuel.

Hijo de  José Lamillar y Anunciación Román, Nació un 20 de Abril de 1926 en el segundo piso del callejón que divide la actual cervecería Arenal y la antigua tienda de Miliucu en San Vicente de la Barquera. 

Fue el único hijo barón de sus cuatro hijos. Sus hermanas  Lines, Sagrario y Carmen (las dos últimas al igual que él ya fallecidas).

A la edad de 5 años se desplazan a la casa de La Revilla en donde pasa su juventud, desempeñando las labores típicas de una casa de campo con ganao.

Fue segador, leñador y camarero, este último oficio le aprende en Bilbao con un tío suyo llamado Severiano, oficio que desempeñaría años después, primero en El Barquereño y luego en El Retiro.

Recién terminada la segunda guerra mundial, llaman a los de su quinta para hacer el servicio militar; Pasa parte de los dos años en el crucero Canarias y el resto en la comandancia de San Vicente de la Barquera, en donde conoce a Adela Fernández Saiz de la Maza, la que seria su esposa y madre de sus hijos.

Adela procedente de la Vega de Pas, vivió desde su llegada a San Vicente( con 7 años)en Boria, en la casa de sus padres, donde viven actualmente sus hermanos Gonzalo, Juan y Mercedes.

El día en que cumplía 24 años, el 20 de abril de 1950, se casan en una ceremonia oficiada por el entonces coadjutor, padre Angel. 

Con una vaca y su cría,.regalo de su suegra Dolores, se dirigen hacia La Revilla, a casa de sus padres. 

Pero el casado casa quiere y al cabo de un año, deciden que deben trabajar para ellos e independizarse, por lo que se desplazan a la localidad de Abanillas en donde alquilan un caserío en el barrio del Arrabal, para la cría y explotación de ganado.

Después de varios abortos, nace su primer hijo. Adela decide desplazarse a casa de su madre en Boria, para alumbrar a su primogénito, dado que en San Vicente, tendría más ayuda por parte de su madre(Dolores) y la comadrona (Salvia). Pero, ese niño tan deseado y querido, fallece a los dos días de su nacimiento el día 10 de Octubre del 1952.Le llaman José Manuel, como su padre.

Hundidos por el dolor y por la situación política del momento, deciden volver a San Vicente.Tienen miedo. La guardia civil, por un lado y los emboscaos merodeando por aquellos parajes por otro,( en ocasiones entraban y salían de la casa como si fuera la suya) hacen que carguen en el carro las pocas pertenencias, venden parte de las 16 vacas lecheras que ya disponían, y con el resto del ganado regresan. Adela estaba de nuevo  embarazada. Samuel, teme que también se malogre. Siempre pensó, que tanto los abortos, como la poca vida del primer hijo, se debía a las condiciones en que " habían" decidido vivir.

Alquilan un piso en las llamadas "casas baratas"en la zona de la Barquera, en el edificio del medio, donde vive actualmente Lita la cafetera. Allí nace el que sería su primogénito. Nació un miércoles 22 de septiembre de 1954 y como no, también le llamó José Manuel.

Como de algo había que vivir, decide echar mano de sus conocimientos de hostelería y le compra el traspaso a los padres de Elvira la mujer del difunto Tolín el mecánico, el bar llamado "la Bermeana", antigua "Bombillera". Él le cambia el nombre, llamándole El Barquereño, nombre que sigue actualmente.

En esta etapa de sus vidas  nacen Begoña y Adelita. 

Cuando Adela, se queda embarazada de nuevo,  se niega a tener en un cajón de madera a cuatro niños, el mayor de 5 años.

Deciden que ya es hora de tener algo propio. Le venden el traspaso del Barquereño a Luguera y en la finca que habían heredado en la Barquera, edifican El Retiro.

Durante la construcción del mismo nace Miguel, el 23 de Septiembre del 1959.

En Julio de 1960 se innagura El Retiro y al año siguiente la bolera con los ases del momento.

Los años de la década de los 60, fueron duros, cuanto si más con 4 hijos de corta edad. El bar (comestibles y bebidas), daba lo justo para sobrevivir y habia que pagar la inversión, por lo que decide enrolarse en el pesquero Pedro Inés(Gento), que mandaba su buen amigo Manuel Cortabitarte (Puli)

Pero la cosa no iba bien. Se vivía de los pescadores y las costeras no eran buenas por lo que se lió la manta a la cabeza y se marchó a la mercante. Corría el año 65 cuando embarcó en el Mar Negro, luego Rio Pisueña, un carguero de la naviera Pereda. 

El 16 de Octubre del 66, nace su hija pequeña Maite.  Al tiempo, le mandaron a la reparación del frigorífico El Puntal en los astilleros de el Ferrol, en donde presenció junto con su mujer, la botadura del B/T Santander, un petrolero de la misma empresa. Corría el año 69.Lo anecdótico del caso es que, en ese buque tanque embarcaría su hijo mayor en el año 1976.

¡13 meses estuvo sin ver a sus hijos!. Si su vida anterior fue dura, esto no lo llevó bien. Entonces el periodo de embarque era de un año y un mes de vacaciones, pero no había otra cosa. Tenia que pagar las deudas contraídas y quería que sus hijos estudiaran. Había que aguantar, la marcha era dura para todos, pero mucho más para él.

Padecía de fuertes dolores en el nervio ciático, para lo cual, a la hora de hacer la maleta lo primero que metía, eran las inyecciones.

Pasó por un tribunal médico y en el año 1978 le dieron la inutilidad total.

Ese año fue especial, pues vio pasar por el altar el primero de Septiembre , a su hijo mayor, José Manuel

Detrás del bar, tenían la finca donde  se sembraban lechugas , tomates, patatas, maíz, etc con un camino central que llevaba a la parte alta donde franqueado por sus dos perros tenían los gallineors y choneras.

Todos los años hacían el matacillu. Samuel  se encargaba de matarlos y descuartizarlos tanto los de casa como los de los alrededores, pues era buen matarife. Siempre elegía los Jueves para dicha tarea, día en que los niños no tenían clase por la tarde. Era feliz rodeado de los más pequeños del barrio y le encantaba poder hacerles rabiar.

Se hacían boronos, morcillas, chorizos, callos y demás partes del cerdo, que se vendían en el bar. Muchas partidas de cartas se echaban a cuenta de la matanza.

Una fatídica tarde de otoño, precisamente jugando una partida de cartas, se le rompió el corazón, calló fulminado. Un infarto de miocardio, dictaminó el médico que le atendió. Tenía 53 años y se fue dejando un gran vacío entre aquellos que le querían.

Samuel Lamillar Román, "Samuel el de El Retiro", murió un 22 de Octubre de 1979, sin conocer a ninguno de sus nietos, lo que era su ilusión

En la actualidad el gran amor de Samuel y Adela enmarcan una gran familia formada por sus cinco hijos, ocho nietos y una bisnieta

Jose Manuel Lamillar Fernández

Se puede decir que dejo una gran huella y si algo más se puede añadir es lo que repiten todos aquellos vecinos que le conocieron:

"¡¡¡Que gran persona era Samuel!!!!"

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