lunes, 9 de julio de 2012

SAN LÁZARO

El domingo día 8 de julio, asistimos vestidos con los trajes típicos y cargados con los instrumentos musicales de folclore, a la festividad de San Lázaro, en Abaño. Llegamos a este lugar acogedor, por una carretera de segadas orillas y siguiendo el río Escudo; está rodeado por las marismas de Rubín, las montañas que dibujan en su orografía, el ferrocarril de vía estrecha y la autovía, la casona y el Lazareto medio en ruinas del siglo XII, y en ese mismo alto, la cercana Acebosa. Esta justo en medio de los municipios de San Vicente y Valdáliga. Es un paisaje silencioso y natural, con una flora y fauna digna de ser admirada.
Sus relajados habitantes estaban ya entrando a la misa mayor cuando llegamos con nuestros pertrechos.
Silenciosos, seguimos la Eucaristía en el exterior del templo, escuchando con deleite las voces de nuestra Coral Barquera, que como cada año, intenta acompañar en todas las fiestas de este Ayuntamiento, además de participar en concursos, certámenes y festivales de otras provincias. Un trabajo encomiable que merece, desde estas líneas, un agradecido aplauso.
A la finalización de la misa, sacaron al exterior a San Lázaro, una imagen de aproximadamente, un metro de altura; sus ojos causan admiración por su expresividad. Cuando el templo se abrió al culto, fue construido en 1.959, algunos habitantes de esta pedanía, donaron todas las imágenes que representan a los santos.
Nuestro grupo, bajo la indicación de los componentes de la comisión de fiestas, acompañamos al Patrón hasta la plaza del pueblo. Desde allí, subimos al templete y comenzaron los sones del folclore en honor y presencia del Patrón de Abaño, las autoridades y vecinos.
Los componentes de la Escuela Municipal de Folclore, acometió con énfasis su labor de recordar estas prácticas ancestrales; hicieron un recorrido musical con cinco instrumentos, gaita, pandereta, dulzaina, tambor y grupo de voces, ante un público que admiraba semejante exhibición, que se refugiaban de la solana, disfrutando del refrigerio y la correspondiente bebida, mientras, observaban las variadas vestimentas y estilos musicales, admirando a los cuatro jovencitos que ejercían con gusto esa actividad y la habilidad de todos los componentes.
Bajamos a la plaza después de pasada la hora y media de actuación, nos recibieron con un aplauso. Nosotros seguimos hablando de nuestro cometido de retomar lo ancestral, aquello que fue nuestro origen, que hacemos llegar por medio de la música, ropajes y bailes; las jotas fueron interpretadas por una pareja de pejinas de gala.


La comisión de fiestas había preparado un tentempié para los ciclistas de la prueba de MTB, coral y grupo folclórico, que satisfizo la sed y calmo el apetito. Además, la comisión convidó a vecinos y visitantes con unas tapas en su bar.
Fueron tres días de actividades y fiesta, un ambicioso cartel para un pequeño pueblo, aunque, son gente muy activa. Comenzaron el viernes, un día deslucido por las intensas lluvias, se compensó en los dos días siguientes con las previstas y múltiples actividades.
Agradecemos al pueblo de Abaño y los componentes de su comisión de fiestas, que demandaran nuestra presencia. Nos agrada mostrar lo que ha llegado por medio de la tradición oral, las vestimentas e instrumentos musicales. El orgullo de nuestros orígenes.
Ángeles Sánchez Gandarillas
8-VII-2012



1 comentario:

  1. que envidia, como me gustaria poder bailar y tocar la pandereta

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